Capítulo 21

Carlos y Diana se miraron a los ojos, ¿qué acaba de pasar? Se separaron y sin decir ni una palabra, Diana se puso a recoger un poco el salón para disimular.Los dos buscaban un porqué a lo sucedido y ninguno decía nada. Había sido un momento de mucha pasión y aunque estaban bajo los efectos del alcohol, a los dos les gustó y no hubieran querido parar.
La casa estuvo totalmente en silencio pero de repente se escuchó en a calle:
- ¡DIANA! ¡CARLOS!
Carlos y Diana se asomaron a la ventana, eran los demás.
- Bajaros un rato aquí, a la calle, ¡qué es año nuevo! -Gritó David
- ¡La fiesta de verdad se hace en la calle! - Gritó después Dani
Un vecino se asomó y dijo:
- Callaros ya, hombre. ¡Que no son horas!
- Sí, son las..., espera que lo miro - Dijo Carlos mirando el reloj de la casa. - Las 4:30 para ser exactos.
- A dormir ya, ¡GENTUZA! - Volvió a decir el vecino
- Lo siento Roberto, ya no molestamos más - Se disculpó Rebeca
- ¿Cómo has dicho que se llama? - Preguntó Álvaro susurrando a Rebeca.
- Roberto - Dijo ella.
- ¡¡ROBERTO, EL DEL CULO ABIERTO!! - Gritó Álvaro un poco borracho sin saber lo que hacía.
Todos comenzaron a reírse pero antes de que causaran más problemas con los vecinos, Diana dijo:
- Shh! Esperadnos que ya bajamos.
- Bájanos unos cola-caos, que tenemos sed - Pidió Dani
- ¡No! ¡A callar! - Volvió a decir Diana
Carlos y Diana cogieron sus abrigos y se bajaron a la calle con ellos. Carlos, cuando salían dijo:
- Que carácter, ¿eh?
- Mucho,  por cierto, tu y yo tenemos que hablar.
- ¿De qué?
- De lo que ha pasado antes.
Cuando se juntaron con los demás, se fueron al parque que había no muy lejos de allí. Se sentaron en el banco en el que habían acostumbrado a sentarse y Dani preguntó:
- ¿Y nuestros cola-caos?
- No hay - Dijo Diana riéndose.
- Ah, pues el próximo día te lo robo - Dijo Carlos aún bajo los efectos del alcohol.
Los seis estuvieron un rato hablando y cuando ya hacía más frío decidieron volver a casa. 
- Diana, yo no me he bajado las llaves, abre tú. - Dijo Rebeca llegando al portal.
- Espera...- Dijo Diana buscando las llaves.- Se me han olvidado arriba.
- Toma ya, año nuevo y tirados en la calle - Dijo David riéndose.
- Esperad voy a llamar a Sheila.
Diana llamó a Sheila:
- ¿Sheila?
-Si, dime Diana
- ¿ Estabais dormidos?
- Que va, si no hemos dormido nada.
- A vale, es que hemos tenido un problema.
- ¿Qué ha pasado?
- Nos hemos dejado las llaves en casa y ahora no podemos entrar.
- Joder, esperad que ahora vamos para allá
Sheila y Blas cogieron sus cosas y fueron hacia allí. En la calle empezó a hacer más frío y Diana comenzó a tiritar. Carlos, sin saber el porqué, se quitó el abrigo y se lo puso por encima a Diana. En ese mismo instante llegaron Blas y Sheila. Los ocho subieron a casa y comenzaron a recoger el salón. 
A las 7:00 de la mañana los chicos decidieron irse a sus casas a dormir y las chicas se quedaron descansando.